martes, 7 de mayo de 2013

DEMOCRACIA COMO VALOR, AUTORIDAD Y PODER

Etimológicamente, Democracia es una palabra formada por los vocablos griegos δῆμος (demos)= Pueblo, y κράτος (Kratos)=Poder; dando a entender a la palabra como El Poder del Pueblo.
La democracia se ha afianzado como un valor universal, que se considera necesario preservar a fin de garantizar el desarrollo y la consolidación de viejos y nuevos derechos. Se trata de la elaboración progresiva de una idea y de prácticas que comprenden, al mismo tiempo, un marco conceptual en base al cual se establece la igualdad de todos los seres humanos y se instaura un cuerpo reglas e instituciones destinados a asegurar el ejercicio de un conjunto de derechos y facultades.
En la práctica, existen muchas variantes del concepto de democracia, algunas de ellas llevadas a la realidad y otras solo hipotéticas. En la actualidad los mecanismos mas extendidos son los de la democracia representativa, en el cual el pueblo solo esta limitado a elegir a sus representantes.

La autoridad es interpretada por Max Weber, como dominación, es la probabilidad de encontrar obediencia dentro del grupo determinado para mandatos específicos. Afirma que en el caso concreto esta dominación o autoridad puede descansar en los más diversos motivos de sumisión, que se dan por habituación o por arreglos afines. La obediencia es esencial para que se ejerza la autoridad.
Desde un punto de vista sencillo, la democracia, es simplemente la forma de gobierno en la que los conductores del estado son electos por mayoría en votaciones. Este carácter es fundamental y determina todas las demás características de la democracia como sistema de gobierno. La democracia como valor es indispensable en nuestra sociedad ya que es importante para todos los ciudadanos elegir al que será nuestro gobernante.

Se tiene que usar a la democracia y a la autoridad como instrumentos de cambio social, de solidaridad nacional, es decir, que se requiere aplicar estas dos cosas si se quiere mejorar la calidad de vida de un pueblo o país, o simplemente para que las personas se sientan a gusto de saber que algún gobernante esta gobernándolos gracias a su participación democrática, aunque cabe señalar que en México tenemos problemas de corrupción lo cual conlleva a que nuestra democracia no sirva para nada y que los votos sean simples teatros políticos disfrazados y hagan creer a la gente que su participación es importante, cuando no es así, las personas que están en el poder son los que deciden quien sigue en el poder y quien no.

Por eso principalmente es que la democracia debería ser principalmente un valor, ya que si todos los ciudadanos, ya sean políticos, habitantes etc. La aprenden así, sabrán que faltar a ella es faltar a los valores éticos que nos rigen como personas y faltar a nuestra nación.

CONSTRUCCIÓN DE UN SISTEMA NORMATIVO

Un sistema normativo es un conjunto de reglas, pautas o leyes que nos ayudan a regular nuestro comportamiento.
Para construir un sistema normativo debemos de tomar en cuenta varias situaciones (o normas) de la sociedad en la que vivamos, como por ejemplo:

 Usos, Hábitos y Costumbres: Estas generalmente no están escritas y básicamente                     están basadas en las tradiciones de una comunidad

  Normas Jurídicas: Estas son aquellas normas que se recogen en los códigos jurídicos que toda sociedad desarrollada posee y estos regulan distintos aspectos de la vida social.

  Normas Morales: Son las que regulan la convivencia y están reguladas por una especie de convencimiento personal o presiones sociales que hacen en el individuo desarrollar los sentimientos de culpa o vergüenza.
   
   Normas Éticas: El objetivo de estas es lograr un modo de vida acorde a la dignidad de todos los seres humanos.

NUEVOS ENFOQUES DE  LOS VALORES

El problema de los valores es hoy día motivo de gran preocupación. En casi todos los países la juventud se siente profundamente insegura de su orientación con respecto a los valores; aquellos vinculados a las diferentes religiones han perdido buena parte de su influencia; los individuos sofisticados de todas las culturas parecen inseguros y preocupados por los objetivos que valoran.

La cultura mundial, en todos sus aspectos, se muestra cada vez más científica y relativista, y los criterios rígidos y absolutos sobre los valores, recibidos del pasado, parecen anacrónicos. Lo que es quizá más importante, el individuo moderno se ve acosado desde todos los flancos por reclamos de valores divergentes y contradictorios; ya no puede instalarse cómodamente en el sistema de valores de sus antepasados o de su comunidad, como podía hacerlo en una época histórica no muy lejana, y vivir su vida sin ponerse a examinar jamás la naturaleza y los supuestos de ese sistema. 

LOS JOVENES Y EL VALOR DE LAS MODAS

Una moda es un estilo aceptado o popular, de actualidad en un determinado campo. Las modas pasan por muchas etapas. Primero, por lo general, una cantidad pequeña de consumidores se interesan por algo nuevo que los distingue de los demás. Después, otros consumidores se interesan gracias al deseo de copiar
a los líderes de la moda. A continuación, la moda adquiere popularidad y es adoptada por todo el mercado de masas. Por último, la moda se desvanece; conforme los consumidores empiezan a dirigirse hacia otras modas que están empezando a captar su atención. 


Así, las modas tienden a crecer con lentitud, a gozar de popularidad durante cierto tiempo y a descender poco a poco. 


Las modas pasajeras son modas que entran al mercado con gran rapidez, son adoptadas con gran celo, llegan a la cúspide muy pronto y decaen muy velozmente. Sólo dura un período breve y tienden a atraer a una cantidad limitada de seguidores.

SOCIEDAD DE CONSUMO

Sociedad de consumo es un término utilizado en la economía y sociología, para designar al tipo de sociedad que se corresponde con una etapa avanzada de desarrollo industrial capitalista, y que se caracteriza por el consumo masivo de bienes y servicios, disponibles gracias a la producción masiva del mismo.




Si por un lado, hay quien afirma que la discusión sobre la bondad o maldad de la sociedad de consumo es más de carácter ético o ideológico que estrictamente económico, en cuanto que la sociedad de consumo no sería sino un estadio avanzado de las sociedades industrializadas con el objeto de cubrir las necesidades y deseos de los consumidores; por otro hay quien señala que si la economía es la ciencia encargada de satisfacer las necesidades  humanas con los recursos disponibles, es un problema económico de primer orden plantear en qué medida la sociedad de consumo cubre nuestras necesidades, o bien destina muchos recursos valiosos a satisfacer deseos fútiles. Una de las críticas más comunes sobre la sociedad de consumo es la que afirma que se trata de un tipo de sociedad que se ha "rendido" frente a las fuerzas del sistema capitalista y que, por tanto, sus criterios y bases culturales están sometidos a las creaciones puestas al alcance del consumidor. En este sentido, los consumidores finales perderían las características de ser personas humanas e individuales para pasar a ser considerados como una masa de consumidores a quienes se puede influir a través de técnicas de marketing, incluso llegando a la creación de "falsas" necesidades entre ellos.

Desde el campo ambientalista, la sociedad de consumo se ve como insostenible, puesto que implica un aumento constante de la extracción de recursos naturales, y del vertido de residuos, hasta el punto de amenazar la capacidad de regeneración por la naturaleza de esos mismos recursos imprescindibles para la supervivencia humana.

Desde el punto de vista de la desigualdad de riqueza internacional, se ha señalado también que el modelo consumista ha conducido a que las economías de los paises pobres se vuelquen en la satisfacción del enorme consumo de las sociedades más industrializadas, mientras pueden dejar de satisfacer necesidades tan fundamentales como la alimentación de sus propias poblaciones, pues el mercado hace que se destinen los recursos a satisfacer a quienes pagan más dinero.

Los dos enfoques anteriores se combinan a la hora de señalar que, si la mayoría de la población mundial alcanzara un nivel de consumo similar al de los paises industrializados, recursos de primer orden se agotarían en poco tiempo, lo que plantea serios problemas económicos, éticos y políticos.


La sociedad de consumo no sólo se refiere al consumo de bienes sino también al de servicios, dado que cada vez tiene más importancia en las sociedades desarrolladas el consumo de servicios; fruto, fundamentalmente, de la mayor disponibilidad de renta y tiempo libre. En este sentido, la crítica a este tipo de sociedades viene dada por el efecto de manipulación  de la información , al objeto de "moldear" al consumidor para convertirlo en el "consumidor ideal" que pretenden las empresas que tienen el poder de hacerlo.

Por: María Guadalupe Gutierrez Cárdenas